El martes se cumplieron cinco meses desde que Talina Fernández murió y sus hijos; Coco y Pato Levy se encuentran tratando de desahogar tanto sus deudas como los gastos que implica la manutención de la casa de su madre, debido a que por su gran tamaño requiere de muchos y constantes cuidados, motivo por el que desde el mes de octubre pusieron a la venta algunas pertenencias de la “dama del buen decir” en un bazar, sin embargo, hay muchas personas que están en desacuerdo con la idea de que se deshagan de las cosas de la conductora, asegurando que están aprovechándose del patrimonio que les dejó.
SE DEFIENDEN
Coco fue el primero en ser cuestionado, pero para él los comentarios de las otras personas no tienen ninguna importancia, pues dijo creer que cuando la gente habla mal de los demás es porque no tiene cosas mejores que hacer: “Que salgan a correr, que tengan algo más útil de hacer con su vida”.
Y, de hecho, expresó que desapegarse de las pertenencias que le recuerdan a su madre ha sido terapéutico en un tiempo en que sigue atravesando el duelo por su partida.
Por su parte, Pato contó que hay ocasiones que leer todo lo malo que se dice de ellos le causa mucha molestia y hasta ganas de responder a quienes no conocen sus razones y porqués.
“La cantidad de ‘hate’ que hay es inenarrable, pero yo trato de no hacerles caso, de repente sí medio me engancho y me dan ganas de pegarles unas buenas palabrotas, pero ay pobrecitos, no tienen nada mejor que hacer que andar criticando, que ‘cómo vamos a vender las cosas de mi mamá’, ‘que qué malos hijos, que por qué no hacemos un museo…’ A ver, wey o sea tú crees que no me estoy quedando con las cosas que a mí me importan de mi mamá”, señaló.